viernes, 17 de octubre de 2014

Acerca del ritmo y la continuidad


- La lentitud nos ayuda a incorporar mas fácil y conscientemente los movimientos a medida que los vamos incorporando a lo largo del aprendizaje.
- La velocidad debe ser uniforme, sin pausas.
- La velocidad con que comencemos es la que mantendremos a lo largo de toda la forma; ya sea una parte o completa.
- Los movimientos serán circulares y suaves, acompañando el movimiento natural de las articulaciones y encadenados en una sucesión continua hasta finalizar.
- El centro de gravedad desciende al tantien (centro energético ubicado a unos 5 cm debajo del ombligo).
- Los pies enraizados desde el principio en el suelo sin perder la liviandad en el resto del cuerpo.
- No exagerar los movimientos para no perder el equilibrio.
- La respiración se hará profunda, suave, natural, abdominal, sin forzarla.
Debe haber una coordinación perfecta entre los movimientos, la respiración, la compaginación sincrónica de los movimientos de piernas y brazos y la ejecución consciente.

Esto último lo alcanzaremos a medida que la práctica se torne fluida, sin hacer esfuerzo en conseguirlo, lo que resulta perjudicial.

Todo esto podemos exponerlo o tratarlo en las clases antes o al finalizar, para que no hayan dudas.

Abrazo!!
Luis Machado

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